El uso de ventosas es una práctica sanativa y terapéutica muy antigua y utilizada en diversas culturas de todo el mundo. Se aplica una ventosa en forma de campana, donde el aire es succionado ya sea con el uso de fuego o manualmente, donde el espacio de presión negativa tira literalmente de la piel hacia afuera. Cómo funcionan? Los acupuntores las aplican a distintos puntos o zonas donde existe estancamiento de sangre, Qi, fluidos, etc. Esta simple aplicación elimina el estancamiento (ej: dolor) y abre los meridianos para que el Qi puede fluir libremente. También ayuda a rejuvenecer los órganos y los meridianos que no funcionen a niveles óptimos. Se sabe que el uso de ventosas en la MTCh activa el sistema linfático, promueve la circulación sanguínea y facilita la cicatrización tisular.
Qué me voy a encontrar en una sesión de aplicación de ventosas?
Muchas personas afirman sentirse completamente relajados y rejuvenecidos después de una sesión con ventosas. Por lo general el material de las ventosas es es el vidrio, pero también se pueden ver ventosas de bambú, cerámica o incluso plástico. Algunas vienen con una válvula de succión incorporada o con una especie de mechero para succionar el aire con fuego. Después de la aplicación, lo más seguro es que queden marcas temporales (como especie de moratones redondos) en los lugares donde se aplicaron las ventosas. Las marcas suelen desaparecer por completo en dos o tres días.
Qué trastornos se tratan con las ventosas?
Por lo general las ventosas se usan como tratamientos paliativo contra dolores crónicos y agudos, trastornos gastrointestinales y problemas pulmonares o respiratorios. Puede llegar a remover toxinas que se encuentran hasta 14 centímetros por debajo de la piel, a la vez que estimula la circulación sanguínea. Otros usos para la terapia con ventosas son la limpieza de colon, reducción de las estrías y de las varices.
